Lo primero de todo, el sexo debe
practicarse con seguridad y los preservativos deben formar parte del equipo de
ataque de una hotwife. Además, otro método como la píldora o el DIU son
aconsejables por si se produce la rotura del preservativo (a mí nunca me ha
ocurrido). No nos dejemos llevar alegremente por esos videos de la industria
del porno, donde una mujer es follada sin protección por varios desconocidos y
se corren en su vagina, ano y boca. Eso está realizado por actores
profesionales con sus garantías de salud y en el mundo real no es así.
Una vez dicho lo anterior, una de
las fantasías más poderosas de una hotwife es ser follada al natural por su
macho, por la carga psicológica que lleva y el placer físico. Para ello debe
aparecer un macho con el que la relación sea firme, haya buena química en la
cama y todos tengamos claro que hay reglas de salud que hay que cumplir. Pues
yo he tenido la suerte de encontrar ese macho y os puedo decir que la
diferencia es notable y mucho más morbosa. ¿Por qué?:
Lo primero que sentir una polla
suave, grande y reluciente en tu vagina sin el latex es mucho más natural y
excitante.
Las sensaciones son bastante
diferentes, como el calor de su polla.
Es un privilegio que ha estado
reservado solo a mi marido durante muchos años y ahora debe compartirlo con mi
amante.
No hay que hacer las paradas para
poner el preservativo.
Y cuando me ha llenado por
primera vez el coño de leche, la sensación de notar el líquido calentito dentro
de mi vagina ha sido muy morboso y, desde luego, un paso importante en las
relaciones de una hotwife con su marido.
Mi macho llenándome de leche
Lo dicho y quiero que nadie lo
olvide. Esta práctica debe estar reservada a amantes de total confianza en
aspectos de salud como de confianza. En nuestro caso, además de los informes
sanitarios, hablar mucho, la confianza y las reglas, yo tengo puesto un DIU y
controlamos los periodos fértiles. Una vez que todo esto está aclarado, solo
queda disfrutar con tu amante.